miércoles, 13 de febrero de 2013

retazo de una muerte

Rellenó los huecos del formulario con rapidez. El señor de la ventanilla lo condujo por el pasillo mientras ojeaba sin demasiado interés los papeles que portaba en la mano. Lo invitó a pasar a una sala gris marengo amueblada con una mesa redonda y dos sillas de líneas rectas. Ninguna ventana, ningún adorno, nada en lo que dejar vagar la mente. Le explicó mecánicamente que no tardarían en llegar y se despidió con un portazo.Una señora más pesada que gorda entró a la habitación. No lo saludó. Ocupó la silla libre y estornudó dejando un rastro de gérmenes y mucosidad en la impoluta mesa. Sacó un pañuelo de su escote con el que se limpió la boca y nariz.Lo miró con sus ojos enfermos y comenzó a hablar:- Mañana lo olvidaré. No se su nombre. A esta sala no llegan los formularios. Normalmente no entro en detalles, ni tan siquiera pregunto, pero hoy, me va a perdonar usted que le diga ... me gusta su traje. me gusta más pq lo lleva sin arrugas. Bueno, lo que le decía , necesito preguntarle, su pelo es realmente brillante, casi tanto como su reloj... disculpe.. hoy me disperso con facilidad, será por la medicación, este resfriado acabará conmigo... Disculpe otra vez necesito una explicación caballero. ¿ pq razón desea morir?
Había encontrado aquel lugar en un anuncio un tanto extraño del periódico. Había llamado nada más verlo. Algo lo empujó. Después de pasar filtros y contestar a muchas preguntas, le habían facilitado aquella dirección. Había llegado buscando aquello que llamaban el descanso eterno y ahora tenía que dar explicaciones. Que fastidio. A caso un hombre no podía simplemente hacer algo sin tener que justificarse??? A caso un hombre no podía morir sin tener que dar o tener una explicación????? Jamás le faltó cariño o techo. No había sufrido ninguna pérdida irremplazable, nunca había sido maltratado y había abandonado a todos sus amores. Había amasado una fortuna que había malgastado en el juego y que posteriormente había recuperado por triplicado en su última inversión.
- Señora, una razón???  No tengo razones para morir, señora. No puedo contestarle a la pregunta. Lo que si puedo decirle, señora,  es que no encuentro ninguna razón para vivir.


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